Querida Madre Bendita, Protectora y Madre de todos, toma a Tu cargo
a los niños no nacidos del mundo. Otorga a los corazones de todas
las madres un especial y generoso amor por sus hijos no nacidos, y
dales el entendimiento de que toda vida es dada por Dios. Cambia los
corazones de aquellos que están en los gobiernos para que vean que
no deben permitir la matanza de los no nacidos. Sé Tú nuestra abogada
ante el trono de Dios, Querida y Bendita Virgen María.
Amén.