Señor,
Se que he pecado,
de pensamiento o de obra,
Pero me postro ante ti,
ante tu grandeza e inmensidad,
y te suplico con todo mi ser,
que me brindes valor,
para afrontar las adversidades.
te suplico por sabiduria,
para tomar buenas decisiones,
te pido por un poco de fuerza,
para levantarme y seguir adelante.
Señor,
tu grandeza no tiene limites,
y ante ti me postro,
para mostrarte mi respeto,
cariño,
lealtad y
confianza!
Señor,
escucha mi llanto,
que clama por ti.
escucha mi canto,
es alabanza para ti.
escucha mi peticion,
y dirijeme hacia el camino.
Señor
en tus manos pongo mi destino.
Por tu grandeza y eternidad.
y por los siglos que te preceden.
Amén.