Hijo: Te entrego a la Protección Divina. Las Alas de Dios te cubren.
Su Luz Guía tus pasos. Su Misericordia te proteje.
El te aparta de los peligros
y con
SU AMOR TODOPODEROSO te lleva por senderos de Paz y de éxito.
Véte tranquilo, Dios vá contigo.
Gracias Padre, que me has dado el Poder de
la Oración.